Información básica para visitar por libre este pequeño emirato, mucho menos conocido que sus vecinos del Golfo Pérsico.
Varios fueron los motivos que me hicieron viajar a Kuwait. Primero, que se trata de uno de los países menos turísticos del Golfo Pérsico, muy alejado de la fama y el glamour de otros lugares como Dubai o Doha. Y me encanta alejarme de los caminos más trillados. En segundo lugar, Kuwait City es una ciudad relativamente compacta, con diferentes atracciones no muy alejadas entre sí que se pueden explorar con facilidad. Por último, me pilló el invierno en Irán y decidí continuar Mi Gran Viaje dando un rodeo en busca de climas cálidos. El país más cercano era Kuwait, y encontré una forma de llegar en barco que me pareció toda una aventura.
Kuwait
La historia del pequeño Estado de Kuwait está marcada por dos acontecimientos que tuvieron lugar durante el siglo pasado. El descubrimiento de enormes yacimiento de petróleo en 1938, que cambió la fortuna del país justo cuando el mercado de perlas naturales se había hundido (Kuwait era el principal exportador a nivel mundial). Y la invasión de Kuwait por parte de las tropas de Saddam Hussein en 1990, que durante un año sembraron el caos, destruyendo edificios simbólicos y saqueando sus riquezas. Además, cuando los iraquíes fueron derrotados por una coalición internacional liderada por Estados Unidos, prendieron fuego a centenares de pozos petrolíferos y vertieron al mar millones de litros de combustible, provocando una catástrofe ecológica sin precedentes.
En la actualidad, el Ministerio de Exteriores recomienda una serie de precauciones a la hora de visitar Kuwait, entre las que destaca vigilar en las mezquitas, centros comerciales o lugares concurridos. Todo a raíz de un atentado ocurrido en 2015, en el que un terrorista suicida del ISIS hizo explotar una bomba en una mezquita, matando a 27 personas e hiriendo a más de 200. El Ministerio también recomienda evitar salirse de las rutas habituales en el desierto (por si todavía queda alguna mina de conflictos anteriores). Y ser cauto en poblaciones conservadoras, como Al Jahra. Yo caminé en solitario por Kuwait City y alrededores (incluido Al Jahra) y no tuve ninguna sensación de peligro. De hecho en muchos casos seguro que era yo el que despertaba el recelo de las familias kuwaitíes que me veían.
ITINERARIO POR KUWAIT
Estuve solo 4 días en Kuwait y por diferentes motivos solo exploré Kuwait City, realizando una excursión al Red Fort, en las afueras de Al Jahra.
CUANDO IR
La mejor época para visitar Kuwait es durante los meses de primavera (de marzo a mayo) y otoño (de septiembre a noviembre), cuando el clima es más agradable. En verano las temperaturas son infernales, y caminar bajo el sol se convierte en toda una odisea. Y en invierno no se está mal durante el día, pero por la noche hace bastante frío (más que en otros países del Golfo Pérsico). Además, durante estos meses llueve de forma ocasional.
Yo visité Kuwait durante el mes de enero y por el día nunca me sobró la chaqueta. Además me encontré con un problema inesperado: el viento, que hizo acto de presencia en demasiadas ocasiones, arruinando la posibilidad de cualquier visita al desierto o de alguna excursión en barco.
VISADO
Los ciudadanos de la Unión Europea podemos obtener un Visado on Arrival, tanto en el aeropuerto de Kuwait como en el Puerto de Shuwaikh. Aunque para evitar colas también existe la opción de gestionar con antelación un Visado Electrónico. El trámite se realiza a través de esta página web del gobierno de Kuwait. Tendrás que rellenar un sencillo formulario; y lo normal es que en pocos minutos recibas un correo con el visado adjunto. Hay que imprimir el documento para presentarlo en el control de aduanas.
El visado es para una única entrada y una estancia máxima de 30 días. Y en el caso de España cuesta 3D. Importante: se paga en efectivo al llegar al país; y solo se acepta moneda local o dólares.
GUÍAS DE VIAJE
-“Oman, UAE & Arabian Peninsula” de Lonely Planet. A simple vista las 35 páginas que esta edición dedica a Kuwait pueden parecer escasas, pero contienen información más que suficiente para visitar los principales lugares de interés. Además es muy recomendable si tienes previsto explorar otros países del Golfo Pérsico.
COMO LLEGAR
La práctica totalidad de los turistas que visitan Kuwait entran por su aeropuerto internacional. Pero yo decidí acceder de una forma mucho más épica: viajando en barco desde Khorramshahr (Irán). Se trata de un servicio gestionado por la compañía Valfajr Shipping, con salida dos veces por semana (miércoles y sábado). Yo compré el billete con antelación a través de una agencia de viajes en Shush, y me costó 452milT.
El barco parte entre las 10h y las 11h, según la época del año, pero se recomienda llegar a la Terminal con 3 horas de margen. Así que lo normal será que pases la noche en Khorramshahr. En ese caso te recomiendo alojarte en el Hotel Negin Arvand (habitaciones individuales muy correctas a 100milT, desayuno incluido); y comer o cenar en el Restaurante Ghasr Rian (local elegante, menú variado y precios asequibles). El hotel está a 2km de la Terminal y decidí desplazarme en Taxi (10milT). Una vez allí comprobé que lo de las 3 horas de antelación es muy exagerado. Yo aparecí con algo más de 2, no había casi nadie, y me tocó esperar un buen rato, cuando podía haber estado durmiendo más horas o apurando el desayuno del hotel.
Los trámites en la Terminal fueron los siguientes:
*Escaneo de mochilas + registro manual de mi mochila pequeña. Aquí llamó la atención mi disco duro externo, y los agentes tomaron nota de él.
*Tarjeta de embarque: la obtuve en un mostrador. De entrada me asignaron un asiento numerado, pero luego pude sentarme donde me dio la gana, ya que el barco iba medio vacío.
*Chequeo del disco duro externo: un agente me lo pidió para examinarlo en un despacho. Pero como se trata de un disco formateado para Apple, al poco me llamaron para que fuera también con mi portátil. Allí repasaron principalmente la carpeta de fotos de Irán. Despertaban sospechas las imágenes de iraníes (¡?) y las de montañas (por si había algún cuartel militar oculto). Menos mal que no fotografié ninguno en mi recorrido por el Río Aras…
*Control de Pasaporte: me sellaron la salida en un papel aparte, sin preguntas.
*Nuevo escaneo de mochilas.
El barco estaba en muy buen estado y fue un trayecto impecable. Yo ocupé un asiento comodísimo, ubicado en la planta superior, junto a una ventana. El viaje duró algo más de 5 horas, y hasta repartieron comida, como si fuera un vuelo: una bandeja de pollo asado con arroz, yogurt, una naranja, Fanta y un té. Al principio emitieron una película a todo volumen, pero cuando acabó reinó el silencio hasta que llegamos a Kuwait. Los pasajeros eran mayoritariamente kuwaitíes con chilaba y pañuelo en la cabeza. Aunque también vi una pareja de aspecto occidental.
En cuanto al recorrido, primero navegamos por el río Shatt Al-Arab, que forma la frontera natural entre Irán e Irak. El paisaje es precioso, con juncos y marismas, pájaros (sobre todo gaviotas y cormoranes negros), barcas de pesca tradicionales (sus tripulantes saludaban)… Aunque también varios puestos de control del ejército, y una enorme refinería de petróleo con chimeneas ardiendo. Después el río desembocó en aguas del Golfo Pérsico, donde el mar estaba más agitado, y pude ver buques de carga y una plataforma petrolífera. Y finalmente llegué a Kuwait, que me recibió con una panorámica espectacular de los rascacielos de la ciudad. Una pena que no está permitido salir a la cubierta y me quedé sin hacer fotos…
Ya en el Puerto de Shuwaikh, estos fueron los pasos:
*Autobús hasta la Terminal de Llegadas: tardamos solo unos minutos.
*Control de Pasaporte: un agente me hizo sentarme junto a la pareja occidental mientras se encargaba de gestionar nuestra entrada al país. Eran Ad y Anne, de Bélgica, y estaban haciendo un largo viaje en bicicleta por diferentes países. Me cayeron muy bien, y además me sacaron de un apuro, porque no tenía Dinares ni Dólares para pagar los 3D del Visado, y Ad me dejó 10Usd sin conocerme prácticamente de nada (al cabo de unos días se los devolví mediante una transferencia bancaria).
*Registro manual de mis mochilas: muy superficial, y llevado a cabo por un simpático agente.
Había leído que el acceso a Kuwait desde Irán era un auténtico calvario, con agentes sometiendo a los viajeros a duros interrogatorios, registros exhaustivos del equipaje… Y yo encima tenía sellos de Irak en mi Pasaporte, así que iba preparado para el peor escenario. Pero al final fue lo más sencillo del mundo, rodeado de caras sonrientes y una atmósfera muy acogedora.
TRANSPORTE
Para moverte por Kuwait City y sus alrededores, las opciones son:
1. Taxi: es la alternativa más cómoda, pero también la más cara. Hay centenares de taxis patrullando las calles de la ciudad a cualquier hora, y encontrar uno es muy sencillo. De hecho, si te ven caminando (y más con una mochila) no pararán de tocar el claxon para llamar tu atención. Pertenecen a diferentes compañías. Algunas como Careem (propiedad de Uber) o Talyaa tienen aplicaciones para móvil a través de las cuales se puede solicitar un vehículo para un destino concreto, conociendo el precio con antelación. Pero varios lugareños me dijeron que Careem era más cara; y la app de Talyaa me pedía un número de teléfono kuwaití para poder activarla.
Son muy pocos los vehículos que usan el taxímetro. En ese caso, yo al principio negociaba la tarifa antes de iniciar el trayecto. Hasta que me habitué a los precios (alrededor de 1D por cada 6km) y empecé a pagar directamente sin hacer preguntas (no recibí ninguna queja). Los vehículos son modernos y están en muy buen estado, con asientos cómodos. En cuanto a los taxistas, suelen ser de la India, Egipto o Bangladesh. Por regla general la conducción es correcta y los desplazamientos son bastante agradables.
2. Autobús: un servicio destinado a los trabajadores de Kuwait con escasos recursos. Los trayectos duran el doble que en taxi (eso sin contar el tiempo de espera), pero a cambio los precios son muy asequibles. El mapa con las diferentes rutas está disponible en internet. Yo encontré las siguientes especialmente útiles:
*Bus 15 o 25: conecta los barrios de Mirqab (centro) con Salmiya (hay muchos hoteles y se encuentra cerca de Marina Crescent). Precio: 0,25D.
*Bus 103: conecta Mirqab (centro) con la población de Al Jahra (donde está el Red Fort). El trayecto dura una hora. Precio: 0,3D.
*Bus X2: conecta Salmiya con el Aeropuerto. El trayecto dura una hora. Precio: 1D.
Teóricamente solo se puede subir o bajar del autobús en las paradas oficiales, aunque esta norma es más o menos flexible en función de las ganas del conductor. Al igual que los taxistas, suelen ser indios o egipcios. Hay varias compañías (KPTC, CityBus, Mowasalat…), pero ofrecen servicios idénticos, compartiendo rutas y tarifas. Yo paraba el primer autobús que pasaba con el número de mi ruta, sin importarme el color.
ALOJAMIENTO
En Kuwait City la oferta hotelera es realmente amplia. Pero como no abundan los mochileros, por regla general se trata de alojamientos orientados a empresarios o familias de cierto poder adquisitivo, y los precios son elevados. La opción más barata de Booking en toda la ciudad me costó cerca de 40€ por noche, y aunque acabé satisfecho, no era ni mucho menos lujosa. Con este panorama, el regateo tiene escaso recorrido.
Si viajas con un presupuesto ajustado, Kuwait es el lugar para explorar alternativas económicas como Airbnb o Couchsurfing. En cambio, la acampada libre está prohibida en todo el país (es necesario obtener un permiso cuya tramitación es muy compleja).
COMIDA
Kuwait no destaca por sus especialidades gastronómicas, y en los menús de los restaurantes aparecen muchos de los platos habituales en el resto de Oriente Medio: hummus (puré de garbanzos), dolma (verduras rellenas), shis tavuk (kebab de pollo), muttabal (puré de berenjena)… Además los precios son prohibitivos. Así que mi alimentación se basó en sandwiches de Falafel o Shawarmas, que compraba en locales de comida rápida frecuentados por residentes libaneses y egipcios. Ni mucho menos la opción más sana, pero fueron solo 4 días y mi presupuesto lo agradeció.
En cuanto a la bebida, me limité al agua mineral. En Kuwait está prohibido el consumo de alcohol, con lo cual no tuve la tentación de gastar algo más en una cerveza.
IDIOMA
La lengua oficial en Kuwait es el kuwaití, un dialecto del árabe del Golfo que habla la totalidad de la población. Para mí se trata de un idioma ininteligible y, a pesar de haber visitado varios países árabes, no paso de las cuatro palabras básicas, como Salam / Marhaba (hola), Ma’a Salama (adiós), Shukran (gracias), Assif (perdón), Min Fadhlik (por favor) o Kayf Halik (cómo estás?).
Por suerte casi todo el mundo tiene conocimientos básicos de inglés (incluidos los taxistas y conductores de autobús), así que me pude comunicar sin muchas dificultades
MONEDA
El Dinar Kuwaití, llamado coloquialmente “keidi” por sus siglas en inglés (KD). A su vez se divide en 1000 Fils. Cuando visité Kuwait el tipo de cambio era de 1D = 3 eur (enero/2020). Está considerada como la moneda más fuerte del mundo, lo cual convierte a Kuwait en un destino realmente caro.
Para obtener moneda local utilicé mis tarjetas BNext y Ferratum en los cajeros automáticos, que están por todas partes. Además, hay muchos establecimientos que permiten pagar directamente con tarjeta, evitando el uso de efectivo.
TELÉFONO
Como mi estancia en el país fue de solo unos días no me molesté en comprar una tarjeta SIM local, y me apañé con el wifi del hotel o de alguna cafetería.
SALUD
No hay ninguna vacuna obligatoria para visitar Kuwait. Aunque se recomiendan las de la Fiebre Tifoidea, Hepatitis A y Tétanos.
Bueno, podría facilitar muchos más datos, pero creo que junto a los 2 posts que he publicado tienes bastante información para hacerte una idea de Kuwait, y podrás decidir si te apetece o no visitarlo. Aún así, si te surge alguna duda, escríbeme y con mucho gusto intentaré resolverla.
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