Información básica para recorrer por libre este país de naturaleza salvaje que consiguió dejar atrás la amenaza del Ébola.
Varios fueron los motivos que me animaron a visitar Guinea-Conakry. Primero, se trata de un desconocido país totalmente al margen de los circuitos turísticos habituales, y esto siempre es garantía de aventuras. En segundo lugar quería explorar la región de Fouta-Djalon, un macizo montañoso que constituye un lugar ideal para la práctica del senderismo, con numerosas cascadas, espesos bosques y aldeas tradicionales. Tercero, los bosques de Bossou, uno de los mejores lugares de África Occidental para la observación de chimpancés en libertad. Por último, tras recorrer Guinea-Bissau decidí continuar Mi Gran Viaje hacia el sur pasando por Guinea-Conakry.
La historia reciente de Guinea-Conakry está marcada por el Ébola, una temible enfermedad que sembró el pánico a nivel mundial mucho antes que el Coronavirus. En diciembre del 2013 un niño de 2 años murió en la región de N’Zérékoré tras jugar junto a un árbol habitado por una colonia de murciélagos infectados con el virus. Su familia también se contagió, y poco a poco el Ébola se extendió sin control por Guinea-Conakry, Sierra Leona y Liberia, en gran medida por la ineficacia y falta de recursos de sus gobiernos.

Guinea Conakry
El Ébola paralizó proyectos empresariales y espantó a los escasos turistas que empezaban a llegar a la zona, causando estragos en las maltrechas economías de estos países. Cuando en junio del 2016 se declaró oficialmente el fin de la epidemia se habían registrado oficialmente casi 29mil contagios, con una tasa de mortalidad del 40% (en Guinea-Conakry fallecieron alrededor de 2.500 personas).
Actualmente el Ministerio de Exteriores considera Guinea-Conakry un destino poco seguro por diferentes motivos: las frecuentes protestas ciudadanas que suelen acaban de forma violenta; la elevada delincuencia en la capital, con robos y atracos habituales (sobretodo de noche); el peligro de inundaciones o caída de árboles durante la época de lluvias; y la inestabilidad en las zonas fronterizas con sus países vecinos. Yo siempre viajé en transporte público y realicé un montón de caminatas en solitario, incluido un trekking de 3 días por la montaña, y la verdad es que no tuve ninguna sensación de peligro.
ITINERARIO POR GUINEA-CONAKRY
En total estuve 28 días en Guinea-Conakry. Comencé mi ruta en Boké, donde llegué por tierra desde Buba (Guinea-Bissau). A continuación viajé hasta la capital, Conakry, y desde allí realicé una excursión en barca a Tamara y Kassa, dos de las Islas de Loos. Más tarde me dirigí a las montañas de Fouta Djalon, que descubrí utilizando como base las poblaciones de Dalaba, Pita y Doucky. Y por último, de regreso a Conakry, me detuve unos días en Kindia. Semanas más tarde entré en la región de la Guinée Forestière desde Liberia y visité Bossou.
CUANDO IR
La mejor época para viajar a Guinea-Conakry es durante la temporada seca, que va de noviembre a abril, cuando los cielos están despejados y hay menos mosquitos (y por tanto disminuyen las probabilidades de contraer malaria). Aunque si el motivo de tu visita al país es recorrer la región de Fouta-Djalon te recomiendo especialmente los meses de noviembre y diciembre, justo después de las últimas lluvias, cuando las cascadas bajan a pleno caudal y las montañas están cubiertas de una vegetación exuberante.
Yo visité Guinea-Conakry en mayo y durante la segunda parte del viaje llovió casi cada día. Aunque por suerte se trataba de chaparrones de escasa duración que me permitieron hacer todo lo que había previsto; y la situación ayudó a que pudiera disfrutar de las cascadas de Fouta-Djalon con algo de agua.
VISADO
Para entrar en Guinea-Conakry es necesario un visado, que se tramita a través de la página web del gobierno. Las condiciones varían en función de cada país, pero en el caso de España el visado da derecho a una estancia máxima de 90 días con una única entrada, y cuesta 80Usd + 1,89Usd en concepto de gastos de gestión.
El proceso consiste en rellenar un formulario; subir una Foto reciente y una copia del Pasaporte; y realizar el pago de la tasa correspondiente. En el formulario se pide el nombre y dirección del hotel donde te alojarás. Yo elegí al azar uno de Conakry sin hacer ninguna reserva y nadie lo comprobó. Por cierto, la página web solo funciona correctamente con Internet Explorer o Google Chrome, así que si habitualmente utilizas Safari tendrás que cambiar de navegador.
Lo habitual es que al cabo de 48 horas recibas un correo electrónico con el visado, que deberás imprimir para presentar en el Control de Pasaportes de la frontera. Yo no lo tuve tan fácil y en el correo que recibí me pedían más cosas:
*Copia del vuelo con el que viajaría a Guinea-Conakry.
*Número de teléfono de una persona de contacto en el país.
*Carta explicando los motivos de mi visita.
Yo contesté indicando que viajaría por tierra desde Guinea-Bissau; que no conocía a nadie en el país al ser la primera vez que lo visitaba y solo tenía el número de teléfono del hotel; y expliqué que llevaba un tiempo viajando por África Occidental y quería conocer los principales lugares de interés turístico de Guinea-Conakry. Tras mi respuesta pasó una semana que se hizo eterna, y cuando ya pensaba que me denegarían el visado recibí un correo con la autorización.
Las alternativas al trámite online son inciertas. La mayoría de embajadas de Guinea-Conakry han dejado de expedir visados y remiten a la página web del gobierno. Y plantarte en el Aeropuerto o la Frontera terrestre sin visado es poco aconsejable, porque los agentes suelen cobrar importes muy superiores al oficial, y si vuelas es posible que la aerolínea te ponga pegas para embarcar.
Mi llegada a Guinea-Bissau se produjo en plena crisis del coronavirus y las autoridades habían establecido un requisito de entrada adicional al Visado: hacerse un test PCR, como máximo 72 horas antes de viajar, y aportar un documento que acreditara el resultado negativo; o mostrar un certificado de vacunación (con alguna de las vacunas reconocidas internacionalmente). Yo opté por la segunda alternativa y no tuve ningún problema en la frontera.
GUIAS DE VIAJE
-“Guinée” de Petit Futé: es la única guía del mercado centrada exclusivamente en Guinea-Conakry, y cuenta con 240 páginas llenas de información detallada para visitar cualquier rincón del país. Imprescindible. El inconveniente es que está en francés.
-“West Africa” de Lonely Planet: solo tiene 15 páginas dedicadas a Guinea-Conakry. Sirve como complemento, para tener una idea general; o si vas a visitar otros países de la zona.
COMO LLEGAR
Entré en Guinea-Conakry por tierra desde Buba (Guinea-Bissau). La población más cercana a la frontera es Candembel, y a pesar de que solo hay 46km de distancia, llegar en transporte público fue realmente laborioso. Estas fueron las etapas:
1. Taxi a la Terminal de Autobuses de Buba: apenas pasaban vehículos, y cuando apareció uno varios lugareños se me colaron y se fueron tan tranquilos, dejándome con cara de tonto (una mujer incluso me miraba sonriendo). Por suerte al momento llegó otro taxi y pude subir (250F), mientras un tipo le decía al conductor “cóbrale al blanco 4milF”. En fin, así son a veces las cosas en muchas partes de África…
2. Transporte Misto hasta Mampatá: en la Terminal me dijeron que no había transporte directo a Candembel, con lo cual tuve que cubrir el trayecto en dos partes. Tras encontrar el minibús que tenía previsto salir hacia Mampatá comprobé que era el único pasajero y me tocó esperar hora y media hasta que se llenó y nos pusimos en marcha. Compré el billete en un mostrador (750F); guardé la mochila grande en la parte superior del vehículo; y viajé cómodamente en uno de los asientos delanteros. La carretera se encontraba en un estado lamentable, con numerosos socavones, y avanzamos a una velocidad de risa.
3. Transporte Misto a Candembel: no tenía muy claro qué hacer para esta última etapa, aunque por suerte llegué a Mampatá junto a un lugareño que viajaba en la misma dirección que yo y se hizo cargo de mí. Al poco apareció un minibús, pero cuando me acerqué el ayudante del conductor quería cobrarme 2milF, un importe desproporcionado. Yo me negué y a punto estuve de quedarme en tierra, aunque en el último momento la intervención del lugareño hizo que me dejaran entrar a cambio de 1000F. La alternativa era viajar en moto-taxi por unos 2,5milF.
El trayecto duró apenas 20 minutos, circulando por una pista de tierra en perfecto estado. De camino cruzamos un tramo de espesos bosques que pertenecen al Parque Nacional de Cantanhez, donde con suerte es posible ver chimpancés en libertad. Yo lo estuve valorando pero al final preferí intentarlo en Bossou.
Una vez en Candembel, a apenas 2km de la frontera con Guinea-Bissau, tenía que conseguir un medio de transporte para llegar hasta Boké, la primera ciudad de cierta importancia. En el post dedicado a Boké explico todos los detalles de este viaje épico, pero en resumen al final conseguí un moto-taxi por 20milF para un trayecto de 90km que duró 3,5 horas. Todavía en territorio de Guinea-Bissau un agente me cobró una tasa de 500F que no acabé de entender (el conductor ya me había avisado). Y más adelante, ya en la frontera, entregué mi Pasaporte a un agente y me selló la salida del país sin preguntas.
A continuación nos internamos en Guinea-Conakry y paramos en dos controles policiales que consistían en sencillas cabañas con la bandera del país y un agente uniformado sentado en una silla. Su misión era comprobar mi documentación y, a parte del Pasaporte y el Visado, me pidieron el Certificado de Vacunación contra el coronavirus. Aunque en realidad los agentes buscaban la excusa para sacarme el dinero. Todo estaba en regla, pero ambos agentes cuestionaron el motivo de mi visita al país. Menos mal que el papel del Visado indicaba claramente “Turismo” y pude continuar sin problemas. Eso sí, no me sellaron la entrada en el Pasaporte hasta un tercer control, situado al otro lado del río Kogon, donde el simpático agente no me puso ninguna pega.
Me sorprendió que en el sello solo aparecía la fecha de entrada, sin especificar la vigencia del Visado o el número de entradas permitido. Por suerte en los dos controles posteriores hasta llegar a Boké los agentes lo vieron correcto y me permitieron continuar, aunque cuando salí del país sí tuve algún problema. Guinea-Conakry es famosa por la corrupción de sus agentes, pero yo utilicé mi táctica habitual en las fronteras y creo que surtió efecto: sonrisas, amabilidad, y sacar temas de conversación todo el rato sin darles tiempo a pensar. Todos los agentes me despidieron educadamente, y el último incluso con un “Welcome to Guinea-Conakry”. Aunque por supuesto ayudó mucho que tenía todos los papeles en regla y hablo Francés.
TRANSPORTE
Para moverte por el país las opciones son:
1. Taxi-Brousse: es el medio de transporte por excelencia en Guinea-Conakry. Se trata de coches destartalados donde el espacio se aprovecha al máximo, con 2 pasajeros sentados junto al conductor y 7 más en las dos filas traseras (de ahí que también se conozcan como “Neuf Place”, una vuelta de tuerca a los Sept Place de Senegal). Normalmente a los extranjeros se les ofrece pagar el doble y viajar solos junto al conductor. Yo acepté en varias ocasiones aprovechando los precios económicos, y la diferencia de comodidad es abismal así que lo recomiendo, especialmente para trayectos largos.
Las Paradas de Taxi-Brousse están ubicadas en las afueras de los núcleos urbanos, y debido a sus dimensiones casi siempre llegué en moto-taxi. Los Taxi-Brousse solo se ponen en marcha cuando están llenos y la gente suele viajar a primera hora de la mañana, entre 7h y 8h, así que te recomiendo madrugar para evitar esperas innecesarias. El billete se compra antes de partir, al conductor o en una mesa de madera situada a escasos metros. Y mi mochila grande viajó en el maletero trasero o en la parte superior del vehículo, en función del espacio disponible. Una vez en ruta las pérdidas de tiempo son constantes, debido al estado terrible de las carreteras y los innumerables controles policiales.
2. Moto-Taxi: una opción inmejorable para evitar los tremendos atascos de Conakry o moverte entre poblaciones rurales. Las motos son potentes y están preparadas para todo tipo de terreno, y los precios son tentadores, así que las utilicé mucho. Pero las condiciones de seguridad son mínimas, viajando sin casco, con maniobras al límite y velocidades excesivas. Algunos trayectos, como mi entrada en el país desde Guinea-Bissau o el día que crucé Conakry de punta a punta, casi me cuestan un infarto. Un accidente hubiera tenido consecuencias fatales. De entrada los conductores acostumbran a pedir tarifas muy elevadas (a veces el doble del precio habitual) con lo cual es necesario regatear.
3. Barca: imprescindibles para alcanzar las islas de Loos. En el post que dedico a esta parte del país detallo cómo viajé entre Conakry, Tamara y Kassa.
ALOJAMIENTO
En Guinea-Conakry la oferta hotelera es escasa y está orientada principalmente a turistas de presupuesto holgado, sin apenas opciones para mochileros. El ejemplo más claro es la capital, donde los precios son prohibitivos y pude solventar la situación milagrosamente gracias a los servicios de Airbnb. En el resto del país encontré alguna habitación aceptable, aunque renunciando a cualquier comodidad, con duchas de agua fría sin apenas presión, o sustituidas por un barreño de agua con un cazo; suministro eléctrico limitado; y sin mosquitera. Y en un par de ocasiones (la isla de Tamara y las montañas de Fouta-Djalon) tuve que hacer acampada libre, utilizando cualquier tipo de estructura para protegerme de las lluvias, desde un viejo faro a casas abandonadas.
Los hoteles básicos de Guinea-Conakry no aparecen en Booking, así que únicamente es posible contactar con ellos por teléfono. Yo siempre aparecí sin reserva, lo cual me permitió negociar el precio y obtener interesantes descuentos. Solo aceptan el pago en efectivo.
COMIDA
La gastronomía de Guinea-Conakry es muy limitada y consiste básicamente en pollo o pescado acompañado de arroz blanco y una de estas 3 salsas: Feuille (un puré de hojas de mandioca o batata); Arachide (elaborada con cacahuetes); o Riz Gras (con diferentes verduras). En los restaurantes básicos solo hay una variante disponible, además de espagueti y bocadillos. En la isla de Tamara y las montañas de Fouta-Djalon me tuve que conformar con pan y latas de sardinas. Solo pude permitirme algún capricho en Conakry, donde hay una variedad razonable de restaurantes, la mayoría propiedad de empresarios Libaneses y con precios elevados.
En cuanto a la bebida, el licor nacional de Guinea-Conakry es el vino de palma, elaborado artesanalmente a partir de la sabia de algunas especies de Palmera. Yo ya lo había probado y no me gustó, así que opté por la cerveza local, marca Guilux, en envases de 0,33l; Coke; o si no había suministro eléctrico y la bebida estaba caliente directamente agua.
IDIOMA
La lengua oficial en Guinea-Conakry es el Francés, que entiende la mayoría de la población. Aunque la gente utiliza habitualmente el idioma del grupo étnico al que pertenece, como el Fula o Pular (el más extendido, sobretodo en las montañas de Fouta-Djalon); el Malinké (hablado por los Mandinka); el Susu (utilizado en la región de la Guinea Marítima); o el Kissi (en la Guinea Forestal). Así que en algunas poblaciones remotas es complicado comunicarse porque el Francés brilla por su ausencia. Yo solo aprendí alguna palabra en Fula para mi trekking de 3 días por Fouta-Djalon: On Djarama (buenos días); Djarama (buenas tardes); y Tana Ala Ton (cómo estás?). Y provoqué más de una sonrisa entre los lugareños que me cruzaba.
MONEDA
El Franco Guineano, que a su vez se divide en 100 céntimos (aunque en la práctica su valor es tan residual que nunca se llegaron a emitir y no hay monedas en circulación). A diferencia de los 8 países que forman la Union Économique et Monétaire Ouest Africaine, en 1959, tras conseguir la independencia, el gobierno de Guinea-Conakry decidió dejar de utilizar el CFA Franc. Pero si se trataba de marcar distancias con la época colonial ya le podían haber puesto otro nombre a la nueva moneda…
Cuando visité Guinea-Conakry el tipo de cambio era de 1 Eur = 9.100F (mayo/2022). Para obtener moneda local utilicé mi tarjeta Revolut en los cajeros automáticos, aunque hay 2 inconvenientes:
*Los importes máximos por reintegro están limitados en función de la entidad, y generalmente no permiten más de 600milF (alrededor de 65€). Esto te afectará negativamente si tienes tarjetas que ofrecen un número determinado de reintegros sin comisión.
*A parte de las principales ciudades, en el interior de Guinea-Conakry los cajeros automáticos escasean.
Encima muy pocos establecimientos permiten pagar directamente con tarjeta (solo hoteles y restaurantes turísticos, y algún supermercado de Conakry); y el billete de mayor importe es de tan solo 20milF (poco más de 2€). Con lo cual esto obliga a ir cargado de ostentosos fajos de efectivo.
TELEFONO
Si vas a pasar mucho tiempo en el país lo más aconsejable es comprar una tarjeta SIM local, porque solo cuentan con redes wifi los alojamientos de lujo. En Guinea-Conakry hay 3 operadoras: Orange, MTN y Cellcom. Tras investigar concluí que las dos primeras tienen una cuota de mercado y niveles de cobertura similares, así que elegí Orange.
Conseguí la tarjeta SIM en la tienda Orange de Boké, situada en la rotonda principal. El proceso de compra fue desesperante y en total tardé más de 2 horas. Es verdad que había bastantes clientes, pero el verdadero problema era la parsimonia con la que atendían los empleados. Hubo un momento en el que desaparecieron todos un rato, no sé si para almorzar o rezar. Primero tuve que dejar mi Pasaporte en un mostrador. Al cabo de hora y media el encargado me lo devolvió con una fotocopia y me cobró 1000F. Poco después me llamaron a una mesa y compré la tarjeta SIM (5000F). Uno de los empleados no paraba de hablar conmigo, enumerando ciudades de España y haciendo fotos con mi móvil (nunca había tenido un iPhone en sus manos). También me activaron una cuenta de Orange Pay que no necesitaba, incluyendo un saldo mínimo (5000F).
Orange ofrece numerosos planes Prepago. Yo escogí uno con 6,5GB de datos, válido para un periodo de 30 días, y me costó 105milF (unos 11€). Aunque puedes elegir desde solo 800MB por 14milF (no se quién podría estar interesado en este plan) hasta 15GB por 185milF. Hay numerosos comercios y operadores privados que teóricamente ofrecen los mismos servicios que las tiendas oficiales Orange, pero yo solo los recomiendo para recargar saldo. No suelen estar acostumbrados a dar de alta a clientes extranjeros y cualquier error provocará que te bloqueen la SIM, con las consiguientes molestias.
En cuanto a mi experiencia con Orange, en general acabé bastante satisfecho. Es verdad que los 6,5GB me duraron muy poco tiempo porque no pude acceder a redes wifi; y que era raro el día que no me llegaba un mensaje publicitario. Pero solo tuve problemas de cobertura en alguna zona muy remota, y si regresara a Guinea-Conakry volvería a utilizar esta operadora.
SALUD
Para visitar Guinea-Conakry se exige la presentación del certificado internacional de vacunación contra la Fiebre Amarilla. Hasta el año 2016 se administraban dosis de refuerzo cada 10 años, pero entonces la OMS determinó que una sola dosis ya era suficiente para otorgar inmunidad de por vida. Aun así antes de entrar en Guinea-Conakry me llegaron relatos de controles policiales donde los agentes exigían dinero por no tener la vacuna actualizada, con lo cual para evitar problemas acudí a un Centro de Vacunación en Bissau y me puse una dosis de refuerzo. Curiosamente como durante mi visita la enfermedad de moda era el Coronavirus nadie me pidió el certificado internacional de la Fiebre Amarilla.
Además se recomiendan las vacunas contra la Fiebre Tifoidea, Hepatitis A y B, Difteria, Tétanos y Meningitis. Y seguir un tratamiento preventivo contra la Malaria. Lo mejor será que pidas cita en un Centro de Medicina Tropical y pongas al día tu cartilla de vacunación para evitar experiencias desagradables.
Bueno, podría facilitar muchos más datos pero creo que junto a los 7 posts que publicaré próximamente tienes bastante información para hacerte una idea de Guinea-Conakry y decidir si te apetece o no visitar este país. Aún así, si te surge alguna duda escríbeme y con mucho gusto intentaré resolverla.
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Comentarios
2 ComentariosAna Lanzagorta
Feb 16, 2023Hola!! Muchísimas gracias por tu blog, y enhorabuena! Quería preguntarte una duda ( complicada lo sé) sobre qué país de Africa Subsahariana me recomendarías para ir en junio o noviembre un mes. He viajado bastante por Africa y estoy enamorada de esta zona (Uganda, Mozambique, tienes que ir!!!, Tanzania, Senegal, Gambia) pero todo lo que leo no me ayuda a decidir qué viaje planificar. Me gusta mucho la naturaleza y conocer culturas. Muchas gracias!
Ganas De Mundo
Mar 2, 2023Hola Ana! Gracias a ti por el comentario! Soy consciente de que todavía me queda mucho que visitar en África. Ahora mismo estoy en Argelia. Teniendo en cuenta lo que dices te recomiendo subir el nivel de dificultad y viajar a Guinea Conakry o Camerún, dos países con mucho que ver y nada turísticos. Me encantaron. Eso sí, mejor noviembre porque junio es época de lluvias en esa zona. Un abrazo!