Datos básicos para visitar de forma independiente este país de islas remotas conectadas por impredecibles barcas de pasajeros y mercancías.
Varios fueron los motivos que me animaron a visitar Guinea-Bissau. Primero, se trata de un desconocido país totalmente al margen de los circuitos turísticos habituales, y esto siempre es garantía de aventuras. En segundo lugar quería explorar el Archipiélago de las Bijagós, uno de los últimos paraísos intactos de África Occidental, con islas remotas como Orango, donde se llega tras un duro trayecto en barca. Tercero, Guinea-Bissau cuenta con numerosos edificios abandonados que datan de la época colonial, principalmente en Bissau Velho y las islas de Bolama y Bubaque. Y a mí me encantan este tipo de sitios. Por último, tras recorrer la región de la Casamance (Senegal) decidí continuar Mi Gran Viaje hacia el sur pasando por Guinea-Bissau.

Guinea Bissau
Guinea-Bissau (antiguamente conocido como Guinea Portuguesa) siempre ha sido un país convulso. Ya en 1956 se creó el Partido Africano para a Independencia da Guiné e Cabo Verde (PAIGC), liderado por el héroe nacional Amílcar Cabral, que luchó con bastante éxito contra el poder colonial. Y tras conseguir la independencia en el año 1973 solo uno de los presidentes electos ha finalizado su mandato, entre asesinatos, golpes de estado (el último tan solo 2 meses antes de mi visita) y hasta una Guerra Civil en 1998. Esta situación de caos y debilidad de los sucesivos gobiernos ha sido aprovechada por los cárteles internacionales de la droga, que desde el 2005 utilizan Guinea-Bissau como uno de los principales puertos de entrada de cocaína procedente de Sudamérica en su ruta hacia Europa. Hasta el punto de que muchos expertos catalogan al país como narco-estado.
A pesar de este panorama el Ministerio de Exteriores considera Guinea-Bissau un destino relativamente seguro. Solo se recomienda extremar las precauciones durante la época de lluvias, por el riesgo de inundaciones o caída de árboles; o en la ciudad de Bissau, donde se producen robos con cierta frecuencia. Yo siempre viajé en transporte público y realicé un montón de caminatas en solitario, y la verdad es que no tuve ninguna sensación de peligro.
ITINERARIO POR GUINEA-BISSAU
En total estuve 19 días en Guinea-Bissau. Comencé mi ruta en Bissau, donde llegué por tierra desde Ziguinchor (Senegal). A continuación realicé diferentes viajes en ferry y barca para visitar las islas de Bubaque, Orango y Bolama, todas ellas pertenecientes al Archipiélago de las Bijagós. Y por último hice un alto en Buba de camino a la frontera de Guinea-Conakry.
CUANDO IR
La mejor época para viajar a Guinea-Bissau es durante la temporada seca, que va de noviembre a abril, cuando los cielos están despejados y hay menos mosquitos (y por tanto disminuyen las probabilidades de contraer malaria). Aunque si el motivo de tu visita al país es la observación de aves o los famosos hipopótamos de Orango se recomiendan especialmente los meses de noviembre y diciembre, justo después de las últimas lluvias, cuando las lagunas están llenas de agua y atraen una gran cantidad de aves migratorias procedentes de Europa.
Yo visité Guinea-Bissau entre abril y mayo y es verdad que no llovió ni un solo día. Pero el cielo siempre estaba cubierto de una fina capa de nubes que estropeaba las puestas de sol; y al ser el tramo final de la temporada seca muchos humedales se encontraban sin agua y costaba más encontrar fauna. Dicho esto, pude hacer todas las actividades que había previsto y acabé muy satisfecho.
VISADO
Para acceder a Guinea-Bissau es necesario un visado. El básico permite una estancia máxima de 30 días con 2 entradas, aunque también es posible solicitar periodos de tiempo superiores, llegando incluso a los 365 días y múltiples entradas. Su trámite se puede realizar de 4 maneras:
1. Embajada de Guinea-Bissau en Madrid: ya sea de forma presencial o enviando por correo el Pasaporte original. Yo en estos casos no me la juego y utilizo los servicios de una empresa de mensajería, que entrega personalmente la documentación en la embajada y recoge el Pasaporte una vez está autorizado el visado. Las pocas veces que lo he necesitado he realizado el envío a través de MRW, pero imagino que el resto de empresas conocidas proporciona servicios similares.
2. Página Web: hace años el gobierno ofrecía la posibilidad de tramitar el visado online a través de esta página web, pero durante mi visita llevaba tiempo inactiva. Aun así lo comento por si algún día vuelve a estar operativa.
3. Consulado de Guinea-Bissau en Ziguinchor (Senegal): esta es la opción ideal si acabas de recorrer la región de la Casamance, como fue mi caso. El consulado se encuentra en el centro de la ciudad, en un edificio de aspecto lamentable, y abre de lunes a viernes, de 8h-14h. La gestión no pudo ser más sencilla: el cónsul me preguntó qué visado quería (opté por el básico de 30 días); rellenó una etiqueta con mis datos; la pegó en mi Pasaporte; y aboné 25milF en efectivo (unos 38€). No tardé ni 5 minutos. Además el tipo fue muy majo y como no tenía cambio me acompañó a una tienda cercana para ahorrarme las molestias.
4. Aeropuerto/Frontera Terrestre: la alternativa menos aconsejable, porque los agentes suelen cobrar importes muy superiores al oficial; y por la incertidumbre (si vuelas es posible que la aerolínea te ponga pegas para embarcar).
Mi llegada a Guinea-Bissau se produjo en plena crisis del coronavirus y las autoridades habían establecido un requisito adicional: hacerse un test PCR, como máximo 72 horas antes de entrar en el país, y aportar un documento que acreditara el resultado negativo. Yo opté por ignorarlo y en la frontera terrestre no me pidieron nada, aunque en los Aeropuertos son más estrictos.
GUIAS DE VIAJE
-“West Africa” de Lonely Planet: cuando visité Guinea-Bissau esta era la única guía disponible en el mercado, con apenas 12 páginas dedicadas a un país con tantos lugares de interés. Solo es útil para hacerte una idea general, o si vas a recorrer otros países de la zona.
Por tanto, para obtener información utilicé el manual “A Descubrir Guinea Bissau”, un proyecto conjunto entre la Unión Europea y la ONG local Afectos Com Letras para promocionar el turismo. Cuenta con 176 páginas, en mi caso la última edición tenía 4 años de antigüedad, y se puede descargar de forma gratuita en la página web consulmarbissau.com). También consulté algún blog de viajes (entre ellos viajaorevienta.es, onlybyland.com o sonsolesmeana.com); y los relatos de Agustín Torres publicados en losviajeros.com.
Es previsible que a corto plazo salgan al mercado nuevas guías centradas exclusivamente en Guinea-Bissau, porque el potencial turístico del Archipiélago de las Bijagós hace tiempo que dejó de ser un secreto y cada vez hay más gente interesada en recorrer por libre el país.
COMO LLEGAR
Entré en Guinea-Bissau por tierra desde Ziguinchor. Te recomiendo llegar lo antes posible a la Terminal de Autobús para evitar largas esperas. Yo había reservado un taxi la noche anterior a través del encargado de la recepción de Casa Motel, pero como me temía no se presentó y tuve que buscarme la vida en la solitaria carretera cuando todavía no había amanecido. Por suerte pasó un moto-taxi y aparecí en la Terminal antes de las 7h por 500F (fui generoso).
Nada más bajar de la moto un tipo me condujo a la furgoneta que tenía previsto partir hacia Ziguinchor. Al principio todo transcurrió sin incidentes y pagué el importe correcto por el billete (4milF), pero después el hombre me pidió 2milF por guardar la mochila grande en el maletero trasero, una cantidad exagerada que únicamente pude reducir hasta los 1.500F (lo normal son 1000F). En fin, por delante tenía un largo camino así que decidí no agobiarme. Al menos solo me tocó esperar un cuarto de hora hasta que la furgoneta se completó con 9 pasajeros, rodeado de gritos, ruido de vehículos, vendedores ambulantes y una pelea a puñetazos entre dos chavales. Además conseguí un asiento muy cómodo y espacioso, situado junto a la entrada lateral del vehículo.
El trayecto duró 6,5 horas por varios motivos: el lamentable estado de la carretera, que se encontraba llena de agujeros; la escasa habilidad del conductor, que no atinaba a esquivar ni un agujero; los constantes controles policiales; y que tuvimos que parar a cambiar una rueda. Y suerte que una niña se puso enferma (no paraba de vomitar) y fue utilizada como excusa para saltarnos los últimos controles policiales. En una de las paradas aproveché para comerme unas galletas a escondidas (era Ramadán). Y en ruta maté a dos mosquitos que merodeaban mis piernas y me dejaron la mano llena de sangre, en una región donde el riesgo de contraer la Malaria es bastante elevado.
Una vez en la frontera de Senegal entregué mi Pasaporte a un agente y me selló la salida del país sin preguntas. A continuación subí a la furgoneta y llegamos a la frontera de Guinea-Bissau, donde las cosas no fueron tan sencillas. Primero tuve que entrar en una oficina con un agente que anotó mis datos en un libro de registro. Después caminar hasta un mostrador donde otro agente volvió a anotar mis datos y me selló la entrada en el Pasaporte. De vuelta en la furgoneta me tocó llevar mi mochila grande a una sala para que un agente comprobara su contenido. No fue un registro muy exhaustivo, pero tuve que abrir cremalleras y sacar mi cámara de fotos de la funda.
La sorpresa llegó cuando de nuevo en ruta paramos a escasos metros de la frontera para otro registro de mochilas; y poco después un tercero. No tenía ningún sentido. Además en el resto de controles teníamos que bajarnos del vehículo y enseñar el Pasaporte a un agente sentado que los miraba con desgana (uno incluso me pidió que se lo abriera yo), cuando lo más ágil hubiera sido que él se acercara a la furgoneta. Así es África…
Ya en Guinea Bissau atravesamos un paisaje con bosques interminables de Cajú (anacardos); aldeas aisladas con casas de adobe y tejados de paja o chapa; y alguna zona de marismas. Y cruzamos los inmensos ríos Cacheu y Mansoa por dos puentes. Eso sí, el último tramo hasta llegar a Bissau consistió en una enorme pista sin asfaltar donde el ambiente era infernal, con nubes de polvo que no dejaban ver nada; calor asfixiante (hay que subir las ventanillas para que no entre el polvo); e infinidad de agujeros. Me parece increíble que esta sea la avenida principal que conecta el Aeropuerto Internacional con la capital del país. Todo un aviso de lo que me esperaba en otras regiones más remotas.
La furgoneta se detuvo en la Terminal de Bissau, situada a 7km de Bissau Velho. Allí uno de los conductores se encargó de conseguirme un taxi, y como el precio me pareció correcto (2milF) pensé que me había hecho un favor. Hasta que más tarde me enteré que la tarifa normal son 750F. No se puede bajar la guardia… Una vez en Bissau Velho caminé hasta el lugar donde había previsto alojarme.
TRANSPORTE
Para moverte por el país las opciones son:
1. Transporte Misto: la principal alternativa para viajar entre las diferentes poblaciones de Guinea-Bissau. Se trata de minibuses destartalados donde el espacio se aprovecha al máximo, con asientos plegables en el pasillo y dos bancos laterales en lugar de maletero trasero, así que me tocó viajar con la mochila grande encima o dejarla en la parte superior del vehículo. Los Transporte Misto solo se ponen en marcha cuando están llenos de pasajeros.
Las Terminales suelen estar ubicadas en las afueras de las poblaciones y en una ocasión tuve que llegar en taxi. Los precios son muy económicos. Según la ruta hay veces que es necesario comprar un billete en un pequeño mostrador, y otras que se paga al conductor al finalizar el trayecto. El mal estado de las carreteras en Guinea-Bissau provoca que los trayectos se eternicen, aunque a cambio constituyen una gran oportunidad para relacionarse con los lugareños.
2. Ferry/Barca: es el medio de transporte para recorrer el Archipiélago de las Bijagós. El Ferry opera entre Bissau y la isla de Bubaque, con salidas semanales. Se pueden consultar los horarios en su página web, en el Puerto, o en las Oficinas de la compañía (Consulmar, de capital español). Hay 3 tipos de billete: 1ª clase (10milF), sala con aire acondicionado; 2ª clase (7,5milF), cubierta superior; y 3ª clase (5milF), cubierta inferior. Aunque solo pueden elegir los lugareños o extranjeros residentes en Guinea-Bissau. Los turistas estamos obligados a viajar en 1ª clase, y encima pagando 15milF. Te recomiendo comprar el billete con antelación en las oficinas de Consulmar, al lado del Puerto, para evitar problemas (hay que entregar el Pasaporte). El Ferry se encuentra en buen estado, con asientos cómodos y servicios básicos (lavabo, un pequeño bar…), y mi experiencia fue impecable.
Para viajar a otras islas de las Bijagós, como Orango, Bolama o Canhavaque, la única opción son las Barcas que transportan pasajeros y mercancías. Los precios son ridículos (alrededor de 2milF por trayecto), pero a cambio la lista de inconvenientes es interminable. Las Barcas no tienen horarios fijos y las salidas se suelen retrasan varias horas o se cancelan en el último minuto. Además la seguridad es realmente precaria, con conductores inexpertos, Barcas atiborradas de carga, y filtraciones de agua que los empleados achican de forma regular. Y se viaja sentado sobre un tablón de madera a gran altura, a veces bajo un sol abrasador y otras salpicado continuamente por las olas.
Las Barcas solo son recomendables para auténticos aventureros, y como ejemplo mi viaje a Orango, durante el que encallamos en un banco de arena y tuvimos que pasar la noche en medio de la nada hasta que subió la marea. Si no tienes problemas de presupuesto una alternativa es alquilar una Lancha privada para moverte con total libertad entre las islas, y poder visitar algunas donde no llegan las Barcas. Pero los precios son una auténtica locura.
3. Taxi privado: solo contraté sus servicios en una ocasión para viajar al centro de Bissau. Los taxistas de Cabo Verde suelen intentar cobrar a los turistas occidentales precios muy superiores a los oficiales, así que será necesario regatear.
ALOJAMIENTO
En Guinea-Bissau la oferta hotelera es escasa y está orientada principalmente a turistas de presupuesto holgado, sin apenas opciones para mochileros. Por suerte yo siempre encontré alguna habitación a precios aceptables, aunque renunciando a cualquier comodidad, con duchas de agua fría sin apenas presión, o sustituidas por un barreño de agua con un cazo; suministro eléctrico limitado; sin mosquitera; y con alguna que otra cucaracha. Además solo aceptaban pagos en efectivo. Estos alojamientos básicos no aparecen en Booking, así que únicamente es posible contactar con ellos por teléfono. Yo siempre aparecí sin reserva, lo cual me permitió negociar el precio y obtener interesantes descuentos.
La única excepción es la isla de Bubaque, que cuenta con diferentes alternativas para todo tipo de bolsillos. En cambio en Bissau los precios son prohibitivos (un lugareño me explicó que la mayoría de hoteles son tapaderas para blanquear dinero). Aquí solventé la situación milagrosamente utilizando los servicios de Airbnb y Booking.
COMIDA
El plato estrella de la gastronomía de Guinea-Bissau es el Caldo Branco, que consiste en arroz blanco con un trozo de pescado de mayor o menor calidad en función del lugar donde te encuentres. En los restaurantes básicos suele ser la única opción disponible y lo comí en infinidad de ocasiones (sobretodo en el Archipiélago de las Bijagós). A parte también pude incluir en mi dieta de forma esporádica arroz con pollo; algún plato de sopa en Bolama (que en realidad era cocido, con fideos, garbanzos y carne); y hasta una pizza riquísima en el Restaurante Sal do Mar de Bubaque.
Fuera de Bissau cuesta encontrar restaurantes, así que preferí hacer solo una comida fuerte al día, y solventar la otra picando unas galletas, o con una barra de pan y una lata de atún/sardinas. Además por todas partes hay vendedoras ambulantes de anacardos, que están riquísimos y constituyen un aperitivo excelente para los momentos de necesidad.
En cuanto a la bebida, el licor nacional de Guinea-Bissau es el vino, elaborado artesanalmente a partir del Cajú (el fruto del anacardo) o de sabia de Palmera. Aunque la gente también se conforma con tetra briks industriales de dudosa calidad. En cualquier caso es un problema nacional, y durante mi recorrido por Guinea-Bissau me tocó lidiar con bastantes lugareños con varias copas de más. Yo probé el vino de Cajú en un par de ocasiones, pero no me volvió loco y preferí la cerveza. A falta de una marca propia opté por las portuguesas Sagres o Cristal (en minúsculos botellines de 0,2l); y Super Bock XL, en envases de 0,66l.
IDIOMA
La lengua oficial en Guinea-Bissau es el Portugués, que habla la práctica totalidad de la población. Se diferencia bastante del utilizado en Portugal, tanto a nivel de vocabulario como de pronunciación. De todas formas, como ambas variantes son similares al Español, no me costó mucho entender a la gente. Yo hablaba Español despacito, incorporando las palabras que iba aprendiendo: Olá (hola), Tchau (adiós), Bom Dia (buenos días), Obrigado (gracias)… Y en general no tuve ningún problema.
En las calles lo habitual es escuchar Kriolu (Criollo), una mezcla de Portugués antiguo y diferentes idiomas según el origen de los esclavos que llegaron a Guinea-Bissau durante la época colonial. Cada región tiene su propia variante dialectal, como el Papel o el Balanta, aunque yo reconozco que no hice el más mínimo esfuerzo por aprender alguna palabra de estas indescifrables lenguas.
MONEDA
El West African CFA Franc. Se trata de la moneda común de los 8 países que forman la Union Économique et Monétaire Ouest Africaine, una especie de Unión Europea que nació en 1945 impulsada por Francia para cohesionar las economías de sus colonias en África Occidental. Actualmente está formada por Benin, Burkina Faso, Costa de Marfil, Mali, Níger, Senegal, Togo y Guinea-Bissau (esta última era una colonia portuguesa pero en 1997 se unió al resto de países para beneficiarse de sus ventajas).
CFA son las siglas de Communauté Financière Africaine, aunque en la calle la gente se refiere a esta moneda sencillamente como Franc. Tiene un tipo de cambio fijo, que desde la creación del euro es de 1 Eur = 656F. Para obtener moneda local utilicé mis tarjetas en los cajeros automáticos, aunque con 3 restricciones importantes:
*Solo hay cajeros en las principales poblaciones de Guinea-Bissau.
*No encontré ninguno que aceptara Mastercard, así que me tuve que olvidar de mi tarjeta Revolut (sin comisiones).
*Todas las entidades cobran comisión de reintegro.
Encima son muy pocos los establecimientos que permiten pagar directamente con tarjeta (solo hoteles y restaurantes de lujo), y esto obliga a llevar siempre efectivo encima.
TELEFONO
Si vas a pasar mucho tiempo en el país lo más aconsejable es comprar una tarjeta SIM local, porque solo cuentan con redes wifi los alojamientos de lujo. En Guinea-Bissau hay 2 operadoras: Orange y MTN (la tercera era Guinetel, de capital público, pero quebró por falta de fondos). Tras investigar concluí que ambas operadoras tienen una cuota de mercado y niveles de cobertura similares, así que elegí Orange.
Mi idea inicial era conseguir la tarjeta SIM en la principal tienda Orange de Bissau, situada en la Plaza de los Héroes Nacionales. Pero cuando llegué estaba cerrada y necesitaba tener acceso a internet, así que me fie de dos chavales que vendían tarjetas ya registradas en las inmediaciones del edificio por 1000F. Orange ofrece numerosos planes Prepago. Yo escogí uno con 10GB de datos, válido para un periodo de 30 días, y me costó 10milF (unos 15€). Pero puedes elegir desde solo 250MB por 500F (no sé quién podría estar interesado en este plan) hasta 100GB por 50milF. El proceso de compra fue muy sencillo y solo tardé unos minutos.
En cuanto a mi experiencia con Orange, la verdad es que en general acabé bastante satisfecho. Solo tuve problemas de cobertura en la isla de Orango, donde según me explicaron funciona mejor MTN; y los 10GB fueron suficientes para mi estancia en el país. Así que si regresara a Guinea-Bissau volvería a utilizar esta operadora.
SALUD
No hay ninguna vacuna obligatoria para visitar Guinea-Bissau. Solo se exige la de la Fiebre Amarilla si procedes de una zona infectada. Además se recomiendan las de la Fiebre Tifoidea, Hepatitis A y B, Difteria y Tétanos. Y seguir un tratamiento preventivo contra la Malaria. Lo mejor será que pidas cita en un Centro de Medicina Tropical y pongas al día tu cartilla de vacunación para evitar experiencias desagradables.
Bueno, podría facilitar muchos más datos pero creo que junto a los 6 posts que publicaré próximamente tienes bastante información para hacerte una idea de Guinea-Bissau y decidir si te apetece o no visitar este país. Aún así, si te surge alguna duda escríbeme y con mucho gusto intentaré resolverla.
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Comentarios
2 ComentariosMario Pérez
May 13, 2023Una información más que valiosa, muchísimas gracias.
Ganas De Mundo
May 15, 2023Un placer compartir, espero poder subir el resto de posts en un futuro no muy lejano